El informe del Centro de Estudios alerta sobre el continuo incremento de precios en medicamentos de consumo masivo. La obligación de destinar un mayor porcentaje del salario para cubrir necesidades sanitarias.
En varias oportunidades Atenea publicó estudios analizando el aumento de los salarios, las jubilaciones y el impacto de la inflación, es decir, el incremento de los precios de los bienes y servicios. El Núcleo de Políticas de Salud presentó en noviembre de 2016 un informe sobre precios de medicamentos dando cuenta que los aumentos -medidos de forma interanual octubre 2015 – octubre 2016- fueron mayores a la inflación del mismo período que llegó al 44.7%.[1]. En esta ocasión, se presenta el Monitor de Medicamentos, con el objetivo de monitorear la evolución de los precios entre octubre de 2016 y marzo de 2017, de algunos de los medicamentos más consumidos.
De los diez medicamentos relevados, nueve presentaron importantes subas en los precios, solo el Ibuprofeno (Ibupirac 600 mg) mantuvo el mismo monto desde octubre de 2016 hasta la fecha.
El caso más notorio es el de Atorvastatina (Normolipol 10 mg) la estatina más vendida en el país. Este remedio utilizado para el tratamiento de la hipercolesterolemia[1] sufrió un aumento del 16%[2]. Similares son los casos de dos antihipertensivos ampliamente utilizados, Bisoprolol (Corbis 5 mg) que acumula una suba superior al 14% en el último semestre y Enalapril (Lotrial 10 mg) con un incremento por encima del 11%.
Atenea resalta que estos tres medicamentos son citados especialmente por ser de uso crónico y consumidos por adultos mayores. Esto impacta negativamente en el bolsillo de uno de los grupos etarios más vulnerables del país, que además desde abril de 2016 sufre la quita del 100% de cobertura por parte de PAMI en una amplia lista de medicamentos.
Otros ejemplos son el protector gástrico de uso común Omeprazol (Ulcozol 20 mg) que subió casi un 5% y el anticonceptivo hormonal comercialmente denominado Divina (Drosperinona/etinilestradiol) con una suba del 12%.
Un caso particular es el de la Levotiroxina (T4 Montpellier), medicamento de uso crónico destinado a tratar el hipotiroidismo -enfermedad de elevada prevalencia en mujeres adultas- cuyo incremento fue del 7%, sumándose al 86% que tuvo esta presentación entre octubre de 2015 y el mismo mes de 2016.
Los resultados del análisis alertan sobre los continuos incrementos de precios en medicamentos que cabe señalar, son productos particulares ya que su demanda es inelástica en relación al ingreso de los hogares. Quiere decir que el consumo de los medicamentos no se encuentra directamente relacionado con el nivel de ingresos de un hogar. En definitiva, los aumentos registrados impactan en el acceso a la salud de toda la población pero principalmente de los grupos más vulnerables que se verán condicionados por la necesidad de destinar un mayor porcentaje del salario para cubrir necesidades sanitarias.
[1] Hipercolesterolemia refiere al aumento de las concentraciones de colesterol en sangre.
[2] Todos los datos han sido calculados en base a los precios publicados por Kairos Web.
[1] Para más información, ver informe completo “La dualidad del aumento para los jubilados” en http://ateneacentro.com.ar/la-dualidad-del-aumento-para-los-jubilados/
